…….lo decía mi tío José María……., en la Corrida de Beneficencia del 8 de Junio de 1960, con toros de Samuel Flores, siendo herido en su primero Manolo Vázquez, resultó como gran triunfador Antonio Ordoñez cortando dos orejas al cuarto toro de la tarde….”la muleta se hace armonía, belleza, pausa, cadencia, tan perfecto todo, tan en maestro y artista todo, que es entonces cuando cabe la duda de si el toro es el instinto fiero y bruto o es la docilidad de los “hermanos” del Santo de Asis; lleva en sus estatutarios, redondos, circulares, naturales, de pecho, altos y bajos toda la gama de armonías y bellezas, que puedan darse en la más lograda obra de arte”, “insigne maestro de Ronda”, así describe Manolo Castañeta el triunfo de Antonio Ordoñez.
Antonio Diaz-Cañavate también elogia en ABC al rondeño, pero anota el único defecto, que a su entender, tuvo la faena “la maldita uve, la uve que forma el torero al presentar al toro el pico de la muleta para embarcarle. Un gran torero como Ordoñez tiene que huir de esta martingala. Tiene que extender la muleta, e inmediatamente detrás de la muleta tiene que estar el torero”. Es difícil encontrar mejor explicación de la teoría de ese “pico” que tantas veces se oye exclamar desde el tendido ………..(“Noelia Jiménez” 23 de mayo de 2008).